

El jinete ilipense Sergio Guisado sufrió a finales de marzo una caída mientras preparaba el Internacional de Lisboa. El accidente ocurrió porque el caballo perdió el equilibrio, lo que provocó su caída, así como un pisotón en el pie por parte del animal. El resultado del percance se resume en que le obligó a olvidarse de los entrenamientos y las competiciones por unos meses.
Lo primero que se le pasó por la cabeza al ver lo que había ocurrido «fue que me pierdo los campeonatos más importantes y eso es lo que más duele». Y es que, esperaba que fuera una recuperación «lenta, ya que es una zona sensible del pie, pero con ganas de estar al 100 % y volver» a los entrenamientos y la competición.
Lenta recuperación
El jinete tuvo que pasar por quirófano y ser operado de la lesión que sufrió como consecuencia del incidente. Después de unas semanas de inmovilización, pudo comenzar su proceso de rehabilitación y según él mismo asegura, a día de hoy «me encuentro recuperado totalmente. Incluso estoy montando los caballos de un amigo los fines de semana».
Con el objetivo de poder volver a los entrenamientos oficiales lo antes posible, continúa realizando ejercicios de movilidad y carrera continúa para estar en buena forma física. Asimismo, Guisado dice encontrarse muy bien a nivel emocional, «con muchísimas ganas y muy motivado» de continuar desarrollando su carrera profesional.
Este es su quinto año como profesional en la élite de la doma clásica, donde ha conseguido numerosos premios. En 2020, a pesar de la pandemia y del parón obligado de los entrenamientos, venció en cuatro campeonatos nacionales y un- décimo en el internacional de Dublín. Además, en el primer trimestre de este 2021 se proclamó campeón nacional de la Copa Audi en Mijas.
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