maría fortuna
Jueves, 18 de febrero 2016, 12:37
De semblante tímido, le cuesta mantener la mirada, será lo que esconden sus ojos aquello que más llama la atención. Nos referimos a un verdadero logro y un inestimable triunfo en esta historia de superación personal. El atletismo le ha mostrado un camino diferente, le enseñó que los retos se pueden lograr y que las cosas buenas también llegan.
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En ocasiones no se encuentran palabras para expresar los sentimientos de uno mismo, pero para ello ya está Javi, su padre, que nos acompaña y relata con orgullo e ilusión cada una de las etapas que ha superado su hijo Gerard. Él afirma que de joven también era atleta, desde que él era pequeño le he hablado del deporte en general, pero en concreto del atletismo. Por lo que cuenta su padre, la afición es heredada pero su aptitudes son innatas. Asimismo informa Javi, que cuando vio las tremendas capacidades que tenía su hijo para el atletismo se volcó en su desarrollo.
Gerard cuenta que siempre le gustó correr ya lo hacía en el colegio o en carreras de la localidad, pero sin tomármelo en serio, exclama. Un día se levantó y se dio cuenta que aquello ya no era solo una afición. Se convirtió en su vida, su ilusión, una de las razones que le mantenían en pie y le permitía mirar siempre hacia delante.
Javi afirma que desde que fueron conscientes de la ilusión que el atletismo despertó en su hijo, tanto él como su mujer y madre de Gerard, Carmen, se centraron en estimularlo y motivarlo para sacar lo mejor de él.
Por ello, entró en el Club de Atletismo de Don Benito, tras superar con creces las pruebas de selección. Allí Gerard comenzó a entrenar con muchos más chicos a los que les unía su afición y entrega al atletismo.
Los progresos de Gerard han sido excepcionales y han ido a pasos agigantados, puesto que en menos de cuatro meses, este chico de tan solo 13 años ha pasado de correr por las calles del municipio, a compartir pista con los mejores del país en el próximo campeonato nacional.
Todo un logro teniendo en cuenta el periodo tan corto de tiempo que ha pasado desde que empezó, pero que le ha bastado para que el Club de atletismo de Almendralejo le fichara como asociado del de Don Benito para participar en dicha competición.
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Mientras que la timidez de Gerard sigue presente en el encuentro, el orgullo inefable de su padre continúa protagonizando la entrevista, con la admiración hacia su hijo por haber logrado lo imposible en tiempo récord. Ya le venía de casta comenta Javi entre risas, reafirmando su relación con el atletismo en su juventud.
Desde que comenzara a correr el pasado octubre, Gerard lleva a sus espaldas varios triunfos. Entre ellos destacan los campeonatos JUDEX. Además de sus primeros puestos en las carreras San Silvestre de Don Benito, Rueca y Zalamea, y su sobresaliente participación en el Campeonato de Mancomunidad.
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Dentro del Club de Atletismo de Don Benito, en octubre corrió su primera carrera quedando en el puesto 25 en la clasificación del Campeonato de
Extremadura. Semanas después se adelantó al decimoquinto puesto en la carrera disputada en Berlanga. La siguiente fue en Almendralejo, donde mantuvo este mismo destacable puesto. Más tarde, en la carrera de Casar de Cáceres mejoró aún más consiguiendo el número 13. Y por último, en la carrera que tuvo lugar en Don Benito, hace escasas semanas, ha logrado situarse en un más que estimable décimo lugar.
Cuenta Gerard que en la tercera carrera aproximadamente, el Club de atletismo de Almendralejo lo fichó para participar como asociado del Club de Don Benito en el campeonato nacional de cross por equipos. Esto fue algo genial porque ese club es el más grande de Extremadura, y cuando me lo propusieron ni me lo creía. Estoy muy agradecido al club por haberme dado esa oportunidad, confiesa entusiasmado. En la actualidad, Gerard posee una marca de 18.37 minutos en 5 kilómetros, un absoluto éxito puesto que comenzó haciendo 24 y ha bajado seis minutos, que en atletismo es muchísimo, afirma Javi.
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Nos encontramos así, con todos los componentes que narran una historia de superación personal donde las haya. Cuando me levanto pienso en correr, en mejorar mis marcas y en llegar a ser alguien importante en este mundo exclama. Lo más importante que se puede extraer de sus palabras es la ilusión con la que habla del tema, y donde se aprecia el entusiasmo que el atletismo ha generado en este joven ilipense.
Otra de las cosas que Javi destaca de toda esta apasionante aventura que lleva recorrida con su hijo, son los valores que el atletismo ha transmitido a Gerard. El hecho de entrenar en grupo con más chicos o representar a un club, son sentimientos de unión que también han influido de manera muy positiva en él. Allí han creado entre todos los chicos una gran familia. Son amigos y compañeros con los que compartir los buenos y malos momentos que se presentan en la vida confiesa. En relación con este tema, Gerard aprovecha para agradecer a su amigo José Luis todo el apoyo y complicidad que ha mostrado siempre con él.
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Cada día tenemos más claro que es un verdadero acierto que Gerard esté allí, habla un padre totalmente volcado en la preparación de su hijo, que recorre cada día de la semana más de 40 kilómetros para llevarlo a entrenar. Además de los entrenamientos, a los que siempre voy, su madre y yo le acompañamos en cada viaje que hace con el club, para que sienta nuestro apoyo y presencia en las carreras. Ver correr a Gerard con esa ilusión y esas ganas, ha sido un auténtico renacer para nosotros dos, afirma.
La complicidad entre padre e hijo se puede observar, pero Javi destaca en todo momento la labor de dos personas esenciales que hicieron posible este sueño. Se refiere a los entrenadores, Luis Mejías y Francisco Parra, dos
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jóvenes extremeños que han sido fundamentales en la vida de Gerard estos últimos meses. Ellos se han volcado en mi hijo, han sacado lo mejor de él y han logrado transmitirle ilusión y ganas de comerse el mundo, y eso es tremendamente admirable, explica emocionado.
Lo más importante que emana de las palabras de Gerard son las ganas y el entusiasmo con el que habla de su todavía breve carrera. Cmo afirman algunos autores, la vida está compuesta por metas, y él confiesa que ya tiene las suyas. Mi objetivo e intención es seguir corriendo, mejorar mis marcas e ir escalando poco a poco porque me gustaría dedicarme profesionalmente a esto, confiesa. Y no cabe duda que lo tiene claro y, por ello, como apunta su padre, no hay día que se levante y no se ponga las zapatillas para empezar una nueva carrera que le ayudará a conseguir en su vida todas las metas que se proponga.
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En ocasiones el ser humano se da cuenta de la fortaleza que puede emanar de uno mismo y la capacidad de transformación hacia algo que merece la pena. Quizás ese sea el mayor logro de este admirable joven ilipense, que comenzó a correr sin pensar y, zancada tras zancada y meta tras meta, un día el atletismo le cambió la forma de ver la vida.
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